En la inmensidad del espacio, en los confines del sistema solar, surge la presencia de este pequeño en tamaño pero gigante en su expresión.
En cierta forma, desconocido, capaz de penetrar en la vida del hombre, introducir modificaciones intensas.
No podemos verlo a simple vista, pero con gran intensidad se manifiesta ayudando al hombre en su proceso evolutivo.
Ubicado en los contornos del sistema solar.
El establece los límites, es el límite donde penetrar más allá de su presencia es ingresar en el plano de lo insondable, lo subterráneo, galaxia misma. Su compañía es pues, el gran desafío humano.
Con su manifestación, la civilización actual ha llegado a conocer una parte de poder; palabra que encierra un significado profundo, que el hombre mancilla y utiliza indiscriminadamente en muchos casos sin ningún tipo de responsabilidad.
Cuestión que en algún momento tendrá que ser analizada para hacerse cargo de tamaña imprudencia.
Un movimiento errático; una órbita extraña de 248 años alrededor del sol, con una inclinación en el plano con respecto a las demás trayectorias, de 17 grados.
¿Quién es en realidad este misterioso planeta galáctico?, cuya aparición en el Universo humano se produce concretamente en 1930.
En un siglo de cambios fundamentales para la humanidad. Aparece como un especial protagonista constituyendo una clave esencial para el ingreso al nuevo estado de conciencia, como si la presencia de Saturno no bastara para cumplir el destino del ser humano.
La consolidación de un nuevo plan de vida requiere necesariamente su labor.
En reiteradas oportunidades hemos dicho que la casualidad no existe, hay causalidad (Ley de Causa y Efecto), y justamente su descubrimiento marca un acontecimiento terrible como ser los primeros pasos hacia la segunda guerra mundial.
Plutón ha introducido el concepto de la búsqueda permanente hacia el espacio infinito del Ser, no precisamente el espacio físico, sino la posibilidad de realizar exploraciones arriesgadas de tesoros escondidos en la profundidad del Océano Cósmico que bajo la tutela de Neptuno permanece todavía indescifrable, y que el Dr. C. G. Jung denominó Inconsciente Colectivo.
El objetivo es dar a luz todos aquellos aspectos que permanecían ocultos, para que la mujer y el hombre tengan la gran oportunidad de su transmutación, renovación, para luego llegar a la trascendencia.
Su efecto se manifiesta a través de la Ley de Polaridad, es decir destruir para construir, degenerar y regenerar; el eterno movimiento del Yin y el Yang, estableciendo que sus partículas poseen la particularidad de la Creación.
El cambio de Conciencia y su respectiva elevación, emplaza al género humano a modificar sus conceptos vigentes, a efectuar una nueva sintonía vibratoria para poder adaptarse a los requerimientos de esta nueva energía, tan poderosa que la humanidad desconoce en sus efectos y alcances.
Su espíritu nos plantea y exige la necesidad de la transformación, el aprender cual es el verdadero sentido del sendero espiritual.
El ofrece desde las tinieblas la luz para comprender la verdadera fe; el funcionamiento de las leyes universales.
La vigencia plena del Amor Cósmico que fluye desde el chakra cardíaco, enalteciendo las verdaderas cualidades del Ser.
Resulta significativo observar los cuatro jinetes del Apocalipsis de San Juan que avanzan sobre la Tierra, ellos tienen el poder que se abate sobre la existencia.
El primero de ellos sobre un caballo rojo, simboliza la guerra.
El segundo negro, representa el hambre.
El tercero la peste, apadrinado por Hades, la muerte Plutón.
Enfermedades de la Edad Media que vuelven con inusitada violencia.
Agregándose el sida, el cáncer, o las provenientes de los desechos nucleares (Chernoby) y por último, el cuarto que a través de un caballo blanco, establece la acción autodestructiva del ser humano con sus actitudes y desenfrenos (daños ecológicos)
Ahora bien, estos aspectos mencionados, serán resueltos con la ayuda de la Creación, y la voluntad esencial del ser humano de resolver este punto apocalíptico de forma definitiva.
En el plano físico y en el emocional, su influencia se ejerce en el modo de relacionarnos con el medio; los celos, la posesividad, la culpa, el control emocional de los demás, la violencia, resultando algunas de las facetas donde interviene mostrando un negativo que debe ser trasmutado utilizando
Su poderosa energía de manera constructiva.
La somatización de estos conflictos produce una obstrucción en el flujo de energía dando origen a las diversas enfermedades.
Todo esto que se manifiesta actualmente, debe ser plenamente derrotado, pues el hombre en lo más profundo de su esencia contiene las llamas del Amor, la Luz del renacer a un nivel espiritual.
Desde lo más profundo de su ser, emergen las enseñanzas sagradas de los Maestros.
En estos tiempos que vivimos como un crucial desafío, nos introduce en un campo de experiencias totalmente nuevo.
Cada uno debe obrar para el despertar de la conciencia, ayudando a otros en el camino.
Que el Amor circunde a todos.
Si tu cambias, el resto también lo hará, no por milagro, sino por la fe, la voluntad, y porque le verdad siempre se impone.
Recuerda que meditar es conectarte con tu propia esencia, es encontrar la verdad en tu propia vida.
Con Amor se puede ver el sentido de tus propósitos, para que sientas la maravillosa energía del Universo que facilita las cosas y que cura.
El gran destructor, esta construyendo bajo las cenizas de la vieja energía una nueva sociedad.
Sustentada en principios de Acuario, pero antes de llegar a este signo en marzo del 2023, que maneja una nueva dimensión, debe traspasar el fuego del infierno, desde el territorio de Capricornio, ámbito de Saturno, con quién actualmente hace una cuadratura.
Regenerando la materia, separando las partículas puras de las impuras, para ayudarnos en este proceso.
Porque el también quiere salir del infierno.
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